Brisa fresca, sol y libertad… Recorrer Madeira en coche es sin duda una de esas experiencias que te quedarán grabadas para siempre en la retina. Sumergirse en la aventura de recorrer esta pequeña isla a tu aire tiene como recompensa descubrir rincones únicos que te dejarán con la boca abierta. Por eso te proponemos esta ruta para recorrer Madeira en coche, descubriendo el auténtico encanto de este vergel en medio del Atlántico.
Primera parada: Funchal
El punto más común para iniciar una excursión en coche por Madeira es Funchal. La capital de la isla es el lugar de partida perfecto, ya que en ella es muy fácil alquilar un coche para ponerse en marcha. Antes de iniciar el camino, te recomendamos que dediques un par de días a conocer y disfrutar de la vida de Funchal, que te sorprenderá y encantará a partes iguales.
Segunda parada: Ponta de São Lourenço
A media hora de Funchal encontramos una de las paradas imprescindibles. La península de São Lourenço es la parte más oriental de la isla y ofrece unas vistas de infarto sobre los acantilados y pequeños islotes de esta zona.
Tercera parada: Parque Natural do Ribeiro Frío
Sí, Madeira es sin duda naturaleza. Por eso cualquier viaje en coche por la isla debe tener su parada obligada en este precioso paraje natural. Vistas, cascadas, levadas… Te recomendamos que hagas un buen descanso en este punto y aproveches para estirar las piernas con cualquiera de las rutas que ofrece este paisaje natural único.
Cuarta parada: Santana
Santana es uno de esos pueblecitos con encanto que hay que ver (sí o sí) en cualquier viaje a Madeira. Sus pintorescas casas tradicionales son uno de sus grandes atractivos, pero no te vayas del lugar sin contemplar la vista desde sus acantilados o probar un buen pescado en cualquiera de sus pequeños restaurantes.
Quinta parada: São Vicente y el Mirador do Véu da Noiva
São Vicente es otra de las paradas obligadas. Aunque el pueblo destila encanto, lo más famoso de la zona son sus cuevas. Atrévete a conocer sus impresionantes grutas y acércate al Centro del Vulcanismo para descubrir el origen de Madeira. Muy cerca, entre Seixal y São Vicente, encontrarás el Mirador do Véu da Noiva (Velo de la Novia), con su impresionante cascada y los contornos de los acantilados madeirenses de fondo.
Sexta Parada: Porto Moniz
Las famosas piscinas naturales de Porto Moniz son el principal atractivo por el que los visitantes se acercan a conocer este enclave. Pero además te recomendamos que visites su bosque de laurisilva, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Séptima parada: Cabo Girão
Es el acantilado más alto de Europa y el segundo más alto del mundo. Además, el suelo acristalado de su mirador, no apto para aquellos con miedo a las alturas, convierte la experiencia en inolvidable. Sin duda, otra parada imprescindible.
Octava parada: Câmara de Lobos
Antes de volver a Funchal te recomendamos parar en este encantador pueblo de pescadores. La Capilla de Nossa Senhora da Conceiçao o do Calhau, del siglo XV, merece una visita, pero lo más recomendable en Câmara de Lobos es probar las típicas bebidas «Poncha» y «Nikita», pasear por su bahía o entablar conversación con los lugareños ¡Te encantará!
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